Juan Cristóbal Espinosa Hudtler - martes, 28 de marzo de 2017
Muchas gracias, Julio, por tus valiosas críticas. Podía haber puesto que las gafas se le habían adherido a la cara y sólo con el chorro de la regadera se le despegaban. Un abrazo y seguimos leyéndonos. Un abrazo.
Julio Iñaki Zuinaga Bilbao - lunes, 27 de marzo de 2017
¡Estupendo!, y podrías haberlo hecho incluso más largo metiéndose en el enojo y la desfachatez que experimentaba Di la Rose. Hay por ahí un comentario de que no se quitaba las gafas salvo para ducharse, que necesita mejor redacción, pero nada del otro mundo.
Juan Cristóbal Espinosa Hudtler - martes, 28 de marzo de 2017
Muchas gracias, Julio, por tus valiosas críticas. Podía haber puesto que las gafas se le habían adherido a la cara y sólo con el chorro de la regadera se le despegaban. Un abrazo y seguimos leyéndonos. Un abrazo.
Pau March - martes, 28 de marzo de 2017
Interesante historia ambientada en el circo de Hollywood. Me ha gustado, gracias.
Julio Iñaki Zuinaga Bilbao - lunes, 27 de marzo de 2017
¡Estupendo! Incluso podrías haber añadido esa desfachatez y el enojo que sentía contra Peck, despersonalizándose a sí mismo De la Rose.
Julio Iñaki Zuinaga Bilbao - lunes, 27 de marzo de 2017
¡Estupendo!, y podrías haberlo hecho incluso más largo metiéndose en el enojo y la desfachatez que experimentaba Di la Rose. Hay por ahí un comentario de que no se quitaba las gafas salvo para ducharse, que necesita mejor redacción, pero nada del otro mundo.