Descripción
Miguel, amó a su esposa aun más allá de la muerte. ¿Sería posible que ella nunca se fuera?
Nota: Editado.
La red social literaria que publica tu talento
Osvaldo Fernandez - martes, 8 de marzo de 2022
He disfrutado este relato. Lo había leído hace unos meses, pero lo dejé descansar para leerlo de nuevo sin la influencia del primer relato de tu autoría que leí entonces, y que me pareció fenomenal. No agregaré nada sustancial a los comentarios, en mi opinión acertados, que emitió Yonhatan. Es cierto que el relato puede beneficiarse de un poco más de ambientación para evitar lucir apresurado. El otro punto que deseo señalar es que pudieras evitar la repetición de la palabra "entretenido", que reaparece creo que al menos tres veces en los primeros párrafos. Cuestión de estilo que merece atención. Sigo aplaudiendo tu imaginación y talento. Enhorabuena!
RE:
María Sorén - viernes, 18 de marzo de 2022
Hola, he revisado nuevamente y tienes razón repetí tres veces una palabra. Ya lo arreglé eso. Y sí, debo darle un poco más de "toque" y trabajarlo. También lo he dejado un poco a propósito para poder tener una visión más fresca. Quizá en unas semanas me ponga a hacerlo, te agradezco vuelvas a leer mis relatos y que te dejen una buena impresión. Saludos y un abrazo afectuoso.
Esteve Pagès Abril - viernes, 20 de noviembre de 2020
Hola María, cuento muy bien escrito y con buena tensión narrativa, felicidades. Es un placer leer tus relatos cortos. Saludos. Y aprovecho para darte las gracias por seguirme. Esteve
RE:
María Sorén - jueves, 26 de noviembre de 2020
Hola, gracias por tus comentarios. Me alegra te haya gustado, y yo también te agradezco me sigas. Un abrazo, con afecto.
Esteve Pagès Abril - viernes, 20 de noviembre de 2020
Muy bien escrito y con buena tensión narrativa. Felicidades de nuevo María. Es un placer leer tus relatos cortos. saludos. Esteve
YONHATAN ESPINOSA GÓMEZ - jueves, 22 de octubre de 2020
Hola María, un saludo desde Medellín. Me estoy pasando mucho por tus obras, eso indica que me gusta leerte :) / El titulo me encantó. La historia me gustó, ya te he dicho que manejas una prosa atrapante, fresca y poderosa... destaco sobre todo tú imaginación y la capacidad de arriesgarte en una historia de terror con un final lindo, un final para sanar.// Desde mi humilde opinión la historia cuenta con algunas inconsistencias que te quiero presentar porque estoy convencido que la obra promete y puede ser un Hit. Los personajes Miguel y Alberto no me terminaron de convencer, pienso que les faltó más construcción ( fortalecer sus lazos de amistad, quizá con algunas vivencias o recuerdos que no tuvieran que ver con la aventura central de la historia hubiese bastado) eso potenciaría ante el lector la amistad de esos dos/ Una vez le decía a nuestro amigo Armando Zami, que nosotros los escritores somos como los directores de una pelicula y los directores siempre le piden a sus actores dejar la piel en la cinta. Pues lo mismo debe hacer el escritor, debemos pedirle a nuestros personajes que dejen la piel en la obra, entonces debemos hacerlos llorar, reir, gritar, jalarse de los cabellos, vomitar, temblar, creerse inferiores o superiores... jugar con sus mentes, a lo que voy es que me parece que nuestros dos amigos actuaron muy naturalmente después de haber visto a ya sabes quién. ¿Piensa cómo actuarías tú si volvieras a ver a la persona más importante de tú vida después de una larga ausencia? Me parece que ambos amigos, Miguel sobre todo lo tomó muy tranquilo./ Cuando los 2 amigos se encuentran por primera vez los dialogos me generaron que esos dos no eran los mejores amigos, ni siquiera amigos fraternales, incluso casi que amigos de saludo. En ese dialogo cada uno se pregunta por la vida del otro y Miguel le comenta que su esposa murió, Alberto no sabía, pero lo corta abruptamente para ir a ver su nuevo departamento ( yo a mi mejor amigo no lo querría despedir tan pronto) a lo que voy es que más adelante relatas que Alberto fue el padrino de bodas de Miguel... (uno escoge de padrino de bodas al mejor amigo, y no me parece lógico que si Alberto era el padrino de bodas no supiera que La esposa de su amigo había muerto?...) // Bueno lo mejor de MGE es que entre todos nos nutrimos con estas apreciaciones, todos estamos para aconsejarnos. Todo lo que te señalo lo hago con respeto y humildad, con el animo de que fortalezcas más tú historia y no queden puntos blandos. // Igual disfruté el relato y destaco tú prosa e imaginación. Tienes un talento enorme que hay que seguir de cerca. Un saludo.
RE:
María Sorén - domingo, 25 de octubre de 2020
Hola, te agradezco tus impresiones. Conozco bien a los dos amigos, Miguel, que evidentemente no se llama así. Es alguien un poco frío y muy controlado y Alberto es de las persona que a pesar de la amistad suele desaparecer de tu vida por largos periodos de tiempo y ni siquiera una llamada telefónica hace. Y luego de la nada vuelves a encontrarlo. Es por ello que Alberto no sabía de la muerte de la esposa de Miguel. Pero coincido en que al convertirlos en personajes, debí trabajar más en su construcción de carácter y alejarlos un poco de como son en realidad. Y hacerlos mucho más cercanos, como debe ser una amistad más normal. Trataré de hacerlo más adelante, en cuánto el trabajo me deje un poquito. Te agradezco te tomes la molestia de leer lo que publico y ojalá y puedas leer algo más de lo mío y puedas comentarme tus impresiones. Saludos afectuosos.
Armando Zami - miércoles, 21 de octubre de 2020
Estimada María, me ha gustado mucho tu relato. Considerando que es un relato tan corto, has logrado generar una buena ambientación, es interesante tu prosa, porque es agíl y logras contar una historia entretenida. Te aplaudo por cinco. Saludos cordiales.
RE:
María Sorén - viernes, 23 de octubre de 2020
Hola, muchas gracias por tus palabras. Me alegra te haya gustado, ojalá y puedas leer alguna de mis otras historias y gustes comentar que te han parecido. Saludos.
Rodro Mtnez - jueves, 8 de octubre de 2020
Qué gran mezcla de géneros, desde el misterio fantástico hasta el romanticismo dramático. Tenso y emotivo a partes iguales. Bravo. Un saludo, María!