Descripción
Camina descalzo por la playa sin prestar atención a la arena que se introduce entre sus dedos irritándole la piel, ni a los fragmentos de conchas que se clavan en su carne. Solo tiene ojos para el inmenso huevo que lleva entre sus brazos.
Luis Ignacio Muñoz - miércoles, 31 de enero de 2018
Muy bueno, me gusta esa brevedad contundente, además deja sumergida la otra parte para repensar la historia, quien era el personaje y que tan grande podía ser el huevo. Saludos.
Pau March - martes, 16 de enero de 2018
Ya está claro entonces; antes fue el huevo que la gallina.. ¿o era el pajarraco de "Ave de pecho"? Tú siempre tan original. Saludos Ginimar.
RE:
Ginimar de letras - miércoles, 17 de enero de 2018
Gracias, Pau. Y tú siempre tan amable. Un abrazo :)
Ginimar de letras - lunes, 15 de enero de 2018
Muchísimas gracias Beto! Por cierto, ¿resolviste el problema que tenías para publicar en esta red social?