Me gusta escribir

Durante gran parte de mi vida ejercí de contable hasta que, por avatares de la vida y después de un divorcio, dos estupendos hijos y una fugaz vida en el sur de Chile al frente de una planta pesquera, acabé viviendo en Cáceres con mi segunda esposa. Allí se hizo evidente la añoranza por mi tierra y me empujó a escribir en ratos robados a mi familia y a mi trabajo de consultor mi primera novela, "El Veneno de los Templarios". Escritor de vocación tardía, me sorprendión la rapidez con la que una editorial se interesó por mi manuscrito y casi de inmediato un agente literario hizo lo propio. A partir de ese momento, escribir se ha convertido en mi droga. En menos de un año, he publicado dos novelas en otras tantas editoriales, he conseguido un agente literario y tengo pendiente de publicar mi tercera novela y un libro de relatos con las fotografías de mi buen amigo y enorme fotógrafo, Juan Carlos Blanco.