Descripción
Es innegable que, debido a la decadencia moral que estamos viendo hoy en nuestro mundo, nuestra humanidad necesita urgentemente una transfusión espiritual antes de morir de maltrutricion divina.Afortunadamente, la continua acción encarnada de Dios en el mundo se manifiesta a través de Jesucristo y Sus auténticos seguidores.En esta difícil tarea, los auténticos seguidores de Cristo tienen la responsabilidad de manifestar Su verdad y Su ejemplo en este mundo a través de su vida diaria.El cuerpo de Jesús es un misterio, pero todavía está presente en nuestro mundo y con Él nuestro Padre celestial también está presente a través de la existencia de las acciones inspiradas del Espíritu Santo en sus auténticos seguidores.Una de las formas más efectivas de personificar a nuestro salvador ante los demás es fusionando Su cuerpo sagrado en nuestro ser, encarnando así Su palabra y Su luz divina en este mundo oscuro.El cuerpo de Cristo no es sólo un concepto abstracto, es una realidad progresiva que se va desarrollando.Es el modelo perfecto para todos los cristianos. Jesucristo es la imagen, el modelo y el espejo que todos Sus seguidores aspiran a encarnar y siguiendo los talentos de cada individuo podemos ayudar a constituir, con el aporte de todos, Su divino cuerpo universal aquí en la tierra para beneficio de nuestra humanidad.
Para comentar, hay que estar registrado