Tipos de personajes: la importancia de los personajes secundarios
¿Necesito un protagonista o dos? ¿Y cuántos antagonistas? ¿Debe haber, además, otros personajes? ¿Qué características deberían tener estos? Estas son algunas de las preguntas que nos planteamos o deberíamos plantearnos al empezar a escribir nuestra novela, porque lo importante no es solo el argumento, sino también los personajes que pueden hacer que no la olvidemos nunca. Nuestra historia debería tener al menos un protagonista y un antagonista, pero estos deberían estar rodeados de un entramado de personajes que les ayuden o les hagan más difícil avanzar. Como no todo gira alrededor de los personajes centrales, te presentamos algunos roles típicos de personajes y su importancia:
El personaje ayudante
Hay dos tipos de ayudantes, el del protagonista y el del antagonista. Como ejemplo rápido pensemos en Hermione y Ron, acompañantes de Harry Potter, y Vincent Crabbe y Gregory Goyle, secuaces de Draco Malfoy. Estos ayudarán o entorpecerán las acciones del protagonista o del antagonista. Aunque reciban el título de ayudantes, estos personajes pueden tener su propio protagonismo e incluso ser decisivos para el desenlace. Pueden ser graciosos, arrogantes, perspicaces… Suelen y deben cumplir una función importante y además, ayudan a abrir nuevas e interesantes subtramas.
El personaje obstáculo
Con sus acciones, sin ser consciente o sin buscarlo conscientemente, entorpece el avance del protagonista. Quizá no tienen ninguna finalidad concreta para ello, sino que está en conflicto con el personaje principal y sin apoyar directamente al antagonista, le perjudica.
El personaje impacto o decisivo
También puede relacionarse con el personaje maestro o mentor, aquel que le da un empujoncito al protagonista cuando está atascado. Es muy importante que este personaje no solucione sus problemas, sino que le ofrezca algunas claves para que el protagonista los resuelva él mismo para que no caiga en la trampa del deus ex machina. Este personaje puede aconsejar, comentar, ilustrar… pero nunca dar la solución directa a un conflicto. Es el que ayuda a generar un punto de inflexión en la novela.
El personaje sorpresa
Aquel que al principio nos parece estar en contra de los intereses del protagonista o del antagonista pero que por circunstancias de la historia, los acontecimientos o el crecimiento personal del mismo personaje se cambia de bando, sorprendiéndonos. Este cambio tiene que deberse a algo, por supuesto. Ha de tener una finalidad (ayudar u obstaculizar al personaje principal, giro argumental, un cambio de pensamiento…).
Estos son algunos de los arquetipos de personajes secundarios que podemos encontrar y utilizar en nuestras novelas. Aunque son los más utilizados, hay más y muchos de ellos pueden combinarse entre sí y formar nuevos prototipos.
Si no estás seguro de cómo construir los personajes, los cursos de Escuela Cursiva pueden ayudarte. Pueden interesarte “Novela: primeros pasos” y “Novela anual”. También te vendrá bien practicar poco a poco y por tu cuenta la caracterización de personajes.
¿Ya has decidido tus personajes para tu próxima novela? ¿Utilizas alguno diferente?
¡A escribir!
Ming Soñadora - viernes, 10 de abril de 2020
La verdad que me a ayudado para empezar mi historia. ¡Gracias por la información!
Mateo Vente Arenas - martes, 25 de abril de 2017
Esto puede ser algo que, no entiendo el por qué, muchos olvidan ahora. Los personajes secundarios dan bastante sabor a las historias; últimamente solo se encasillan en los principales y el resto del reparto es puro relleno sin sentido... Buen articulo, me ha gustado bastante.
RE:
Carlos Manuel Blanco - viernes, 10 de agosto de 2018
Créeme, es un error que muchos cometen y que, lamentablemente, uno también puede terminar cometiendo, ya que al pensar en como será el protagonista y como el antagonista, uno suele dedicar más trabajo a uno o los dos y no a los que están junto a él. Sin embargo es algo que se puede corregir, recuerda que una persona no solo es lo que es solo por su personalidad, sino también por las personas que le rodean y, con ello, influyen de algún modo en su vida. ¨Dime con quien andas y te diré quién eres¨
Lucas D. Lilo - domingo, 4 de marzo de 2018
Me resultó muy útil! Aunque quisiera decir (tal vez equivocadamente y en cuyo caso me corregirán) que no en todos los géneros es necesaria la presencia de un antagonista. Sobre todo cuando hay mas de un protagonista.
Marisa Barco - martes, 11 de julio de 2017
Falta poco para que me anime a mi primera novela! Debo agradecer a todos estos recursos que publican y a otros que he tenido oportunidad de leer que me animan a salir de la zona de confort que me ofrecen los relatos breves o cuentos. Ya subiré algunos de ellos para compartir
Oscar Martínez Casado - sábado, 29 de abril de 2017
Soy de los que piensa que se debe prescindir de personajes secundarios innecesarios, pero que los que se incluyan tengan relevancia y trascendencia. Mejor pocos y buenos que muchos regulares.