Me gusta escribir

Las redes sociales y el consumo de internet lo han cambiado todo. Nuestra rutina es totalmente distinta a la que vivíamos hace unos años y los hábitos de nuestros lectores no tienen nada que ver con los de antes.

Por si esto fuera poco, hoy se publican más libros que nunca, y no porque las grandes editoriales hayan multiplicado la cantidad de títulos que sacan en el mercado, sino porque han proliferado las plataformas de autopublicación que permiten a los autores estar en un mercado editorial, cada vez más diferente.

Ya no solo se trata de escribir bien o conseguir que una editorial publique tu libro, sino que el autor del S. XXI tiene que trabajar su imagen de marca, especialmente en el universo online.

Lo primero que tenemos que tener claro es cuál es nuestro público objetivo. Sí, todos aspiramos a que nos lea cuanta más gente mejor, todo el mundo; pero la realidad es que tenemos que trabajar con nuestro público objetivo para empezar a destacar. Así pues, parémonos, analicemos quién es nuestro lector, y encontremos el mejor camino para llegar a él.

Lo que mejor funciona es tener un blog. Es el mejor punto de encuentro de un escritor con sus lectores. El blog es un espacio donde podemos ofrecer contenido a nuestros seguidores, donde podemos generar fidelización y mayor conexión con ellos. No se trata de que hablemos de nosotros y de nuestro libro, sino que ofrezcamos entradas que puedan resultar interesantes. Hablemos de cosas relacionadas con el libro, de temas de actualidad, interactuemos. Hay muchos autores que tras generar una legión de seguidores en blogs, han publicado sus libros y se han convertido en bestsellers. Plataformas como megustaescribir suponen oportunidades excelentes para conseguir seguidores que en el futuro pueden convertirse en compradores o lectores. Por ejemplo, Laura Ferrero fue usuaria en megustaescribir y después de conseguir repercusión con sus seguidores en la plataforma, autopublicó su obra que funcionó muy bien en el top de ventas de Amazon y hace un año publicó su primer libro de relatos, Piscinas vacías, y en breve nos traerá su primera novela, ambos libros con el prestigioso sello Alfaguara.

Las redes sociales también son nuestras aliadas, pero hay que tratarlas con cuidado. No tenemos por qué tener un perfil en todas ellas. Cada público tiene su plataforma, por lo que cuando tengamos claro, cuál es el nuestro, sabremos dónde focalizar nuestros esfuerzos. Además debemos tener claro que no todas las redes sociales funcionan igual y la frecuencia de publicación también varía. Por ejemplo en Facebook es recomendable hacer no más de 3 posts al día. Twitter es una red social muy efímera y activa, por lo que es recomendable hacer al menos 8 publicaciones al día.

Cada vez los escritores están en redes menos tradicionales para el medio editorial, como Instagram. En ella hay un público más moderno, más al día, más cosmopolita. Es una red social en crecimiento y una de las más usadas en este momento. Un post al día es recomendable para un perfil profesional en Instagram, para no parecer que estamos haciendo spam. La frecuencia en la que publicamos en nuestras redes, determinará también la calidad de nuestros seguidores, porque si les cansamos, finalmente dejarán de seguirnos y les daremos muy mala imagen, hay que encontrar la justa medida.

Antes de crear todos nuestros perfiles, debemos tener claro que lo que tenemos que trabajar es nuestra imagen como autores, no la de nuestros libros. Es decir, que si queremos fidelizar a nuestros seguidores, hagamos que quieran saber de nosotros, de lo que escribimos, que no se queden solo en “un libro” y ya está.

Sí, tenemos mucho trabajo, ya no basta con escribir, publicar y que nos hagan una campaña de marketing; en los tiempos que corren, nosotros mismos tenemos que trabajar duro para que conseguir una legión de lectores que nos sigan.

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