Descripción
Cipriano es un mago a punto de concluir un día normal. Como de costumbre, ha discutido con Rosa, su mujer, pues no les alcanza el dinero para nada. Organiza imágenes, medallas, velones y todo tipo de ensalmos frente a sus altares; cruza el herbolario, ingresa a su casa y se acuesta exhausto. Cae involuntariamente en el plano astral, la morada de los sueños lúcidos. Molesto, se dispone a regresar, cuando descubre a Prometeo encadenado frente a él. No le parece coincidencia que un hierofante de su categoría se tope con semejante personaje. Conocedor del mito se involucra en la escena y cree coadyuvar con su liberación. Luego, satisfecho de sí mismo, ve alejarse al titán al lomo del centauro Quirón, pero cuando está por desandar el túnel que lo devolverá a su casa decide profundizar en los secretos astrológicos. En vano persigue a los viajantes. A partir de ese momento errará por el astral buscando la ruta de regreso.
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