Descripción
Esa audacia de Fernando Rocco, fue dicha con exaltación, con cascadas de palabras, sin pretender entrar en polémicas ni ocuparse de nimias cuestiones. No fue algo que condensado en forma heterodoxa, ni pareció un cuento de misterio (se distanció de cualquier condena lapidaria). Había que tener en cuenta algo que sería simbólico o surgía de una arbitrariedad cautelosa, pero que no sería dañino o insustancial imaginar. Y por supuesto que no se detuvo en las indignas formas de la injuria. Rocco mantuvo su hábito de hablar ruidosamente, dando acaloradas respuestas a sus cortas preguntas; se justificaba en que deseaba superar a la especie de vacío en el que el destino lo había inmerso, y en volver a apreciar las sensaciones y experiencias que eran proporcionadas en el mundo real. Sus argumentos no eran estrechos y no tenían por qué permanecer dentro de confines teóricos. También se hizo una aletargada crítica vinculada al tiempo que se tomó en llegar a esas conclusiones. Es espera solo había servido para que las exigencias de su mujer se hicieran más ampulosas.
Primero había lanzado una representación imaginaria de su meta, y luego se refirió como bromeando a las ventajas que obtendrían. Durante el transcurso de la charla, sus descripciones se fueron relacionando más y más con asuntos llenos de verosimilitud, por lo que a lo último hizo un inventario que no fue venal, incorporando formalismos serios y seguros. Se había liberado del temor para lanzar un su vital imperativo. Sus anuncios irónicos dejaron de mezclarse con lo que sería, más o menos, la ignorancia de su interlocutor, y la cháchara se elevó con la creación de un pedido insólito luego de conjurar una narrativa de fracasos: como su matrimonio yacía desbordado en los límites de lo caótico, y se transformó en una constante batalla en la que aprendió a lidiar con la inercia y el odio.
Relato,23 páginas.
Joel Lozada - viernes, 17 de noviembre de 2017
Una de las arañas logró salirse con la suya. Las arañas suelen ser caníbales...
RE:
daniel bernardo grimberg - lunes, 20 de noviembre de 2017
Jajaja. La areña se cree el ser más rápido, pero se queda quieta...
LAUREANO RAMIREZ - lunes, 21 de diciembre de 2020
Muy bueno y sobre todo lleno de estilo y elegancia. Mi mas sincera enhorabuena.
RE:
daniel bernardo grimberg - martes, 22 de diciembre de 2020
Gracias Laureano!
RE:
daniel bernardo grimberg - viernes, 8 de enero de 2021
Muchas gracias Laureano.
Antoine Roquentin - viernes, 2 de noviembre de 2018
Muy buena narrativa, con excelente final. Felicitaciones
RE:
daniel bernardo grimberg - viernes, 28 de diciembre de 2018
Gracias Javier..
Rachel del Carmen C. Lizarán - viernes, 17 de noviembre de 2017
Nunca aprende el gato escaldado, por que es gato y es tonto... Pero, ¿y el hombre, no sabe todavía que lo barato se paga muy caro?
RE:
daniel bernardo grimberg - lunes, 20 de noviembre de 2017
Tal cual Carmen.
Alvaro Amaya - viernes, 17 de noviembre de 2017
Muy bueno Bernardo. Historia concisa, bien definida. Se te daría muy bien la novela policiaca.